¡Hola! Se acerca el día de San Valentín y si tenéis pensado ir a cenar con la persona que queréis, pero no sabéis a dónde, os voy a dar mis recomendaciones para la cita perfecta. La excusa ideal para ir a probar sitios nuevos.
Deesa
Es el restaurante del Hotel Mandarin Oriental Ritz de Madrid. La decoración es elegante y palaciega, en tonos blancos y dorados y grandes ventanales por los que pasa mucha luz. La propuesta culinaria es de Quique Dacosta. Es toda una experiencia, al entrar te recibe una barra en la que podrás probar una rosa con pétalos comestibles y podrás escoger entre los dos menús: Clásicos Quique Dacosta y QDRitz, ambos con platos increíbles como El Cubalibre de foie-gras o la Crema de anguila y guindillas piparras.
Plaza de la Lealtad, 5.
Villa Capri
Cocina italiana en un entorno de cuento, muy colorido y con inspiración vintage. Romántico e ideal para disfrutar de una buena pasta como su clásica Carbonara y sus pizzas, con la masa al estilo de Nápoles. También hay platos para compartir.
Calle Hortaleza, 118.
Biblioteca del Hotel Santo Mauro
La ubicación es muy original, se encuentra en la biblioteca del Hotel y su decoración está llena de antigüedades. Un espacio para pocos comensales, pero vale la pena y más en una ocasión especial. La carta mezcla las gastronomías de España, Francia y Asia, lo más y tradicional, pero con ciertos lujos. Os recomiendo: Ostras al natural con extra de caviar,Solomillo Lyo, salsa de vino y parmentier a la mostaza, Beluga en crema ácida y Minestrone asiática con setas.
Calle Zurbano, 36.
Bodega los Secretos
Situado en una antigua bodega, la luz en tenue y la decaración mezcla lo retro con o moderno. Perfecto para un día como San Valentín, además no hay cobertura para que disfrutes al 100% sin distracciones. Destaco las Zamburiñas braseas y el Risotto de boletus.
Calle San Blas, 4.
Ovillo
Cocina clásica internacional con muy buenos sabores. Fusión de los sabores España como la Boloñesa de venado. Lo interesante de este sitio es que se basan en los productos de temporada. Su decoración es acogedora, con plantas y tonos mediterráneos, muy luminoso y con toques industriales.
Calle Pantoja, 8.
Noi
Cocina italiana en un ambiente moderno, con una decoración actual y colorida. Puedes observar cómo preparan los platos desde la barra. Su carta es solo de entrantes y pastas, inspirados en la gastronomía del sur de Italia. La Caponata siciliana y los Spaghetti con erizo y tomatito son una elección segura.
Calle Recoletos, 6.
Robata
Comida japonesa de calidad, el restaurante está inspirado en una taberna japonesa. Comida sushi y parrilla con platos como Vieira y atún toro con salsa nikiri. Tenéis que probar los California.
Calle Puigcerdà, 4.
Tucana
Restaurante basado en la gastronomía de la Ruta Panamericana, con fusión de muchos platos tradicionales de países como Argentina o Perú. Un ambiente romántico, pero divertido en donde podréis tomar unos cócteles. De mis platos favoritos de Tucana es el Ceviche de corvina con leche de tigre de ají amarillo.
Plaza de Carlos Trías Bertrán, 3.
Numa Pompilio
Restaurante italiano con una decoración elegante, mesas bien vestidas y un patio interior muy romántico, sin salir del centro de Madrid. La carta es variada, pero las pastas son mi recomendación, además de su sabor, la presentación es muy cuidada. En concreto, la Burrata para compartir, los Ravioli de rabo de toro y los Tallarines con carabineros. Cuentan con una gran selección de vinos y postres italianos como el Tiramisú, que lo montan al momento en tu mesa.
C. de Velázquez, 18.
Arahy
Restaurante sofisticado y elegante decorado con terciopelos y luz tenue, perfectos para una cena romántica. Su carta gira entorno al Atún rojo de Cartagena. Os recomiendo las Milhojas de boletus, el Tataki de atún rojo, pomada de trufa negra y furikake y los Dados de atún rojo con chipotle.
Calle de Alcalá, 58.
Roostiq
Para una cena desenfadada con toques madrileños. Lo mejor son los torreznos con champagne, muy romántico. Lo que no podéis dejar de probar son sus verduras, os tomates son de su propia huerta y tienen un gran sabor. También espinacas, alcachofas y puerros, las Alitas de pollo y la pizza de Burrata con tomates.
Calle de Augusto Figueroa, 47.
Totó
Inspirado en la Italia de los años 50 y en Cinema Paradiso con decoración clásica con barra y mesas bajas. Hay música en directo y la experiencia será muy romántica. La carta está elaborada con productos ecológicos y sostenibles. Os recomiendo: Marinato di pesce, Tortello di brasato, burro nocciola e salvia impanata.
P.º de la Castellana, 38.
La Bien Aparecida
Ambiente cuidado en tonos claros y madera, muy acogedor. Es perfecto para los que preferís comida tradicional, su carta está basada en la cocina cántabra. Podéis probar: Ensaladilla “La bien aparecida”, Flor de alcachofa, Tomate arreglado de Cantabria y Arroz con pollo de corral guisado.
Calle Jorge Juan, 8.
Barra y Mantel
Un restaurante con mucha personalidad y una decoración original e ideal para una cita. Además su carta tiene propuestas muy interesantes entre las que os recomiendo: la Alcachofa rellena de rabo de toro y los Pimientos de piquillo rellenos. También sus carnes.
Calle de Jorge Juan, 50.
Bloom
Es el gastrobar de Salvador Bachiller, un lugar con una decoración muy romántica llena de flores y tonos claros. Una terraza cubierta con un ambiente ideal para un brunch o un desayuno en este día especial. En la carta hay platos también para comidas o cenas como el Tataki de solomillo, Tikka Masala de pollo y opciones más tradicionales como las Carrillera ibérica.
Calle Alberto Aguilera, 54.
Ya me contaréis sobre vuestra velada romántica!! Disfrutad mucho foodies!!
¡Un beso!